Varios estudios previos han investigado la relación entre los patrones nutricionales y algunas enfermedades crónicas como las cardiovasculares , oncológicas y metabólicas, destacando el efecto protector de la dieta mediterránea (MeDi) y los comportamientos de vida saludables sobre la morbilidad y la mortalidad, con beneficios para la salud individual y pública.(PREDIMED trial).
La dieta mediterránea incorpora los hábitos alimentarios de los países de la cuenca mediterránea. Se caracteriza por una ingesta elevada de frutas, verduras, cereales no procesados, grasas insaturadas, una ingesta moderada de vino, una ingesta reducida o nula de carnes rojas, lácteos y grasas saturadas.
Un conjunto considerable de evidencia respalda los efectos beneficiosos de la dieta mediterránea sobre la circunferencia de la cintura, la presión arterial, el metabolismo de los lípidos y la glucosa: revision sistematica (Martinez-Lacoba R. et al. Eur J Public Health 2018), riesgo cardiovascular (Annie Sebastian S et al. Curr Probl Cardiol 2024), enfermedad cerebrovascular (Saulle R et al. Clin Ter 2019), cancer ( Nagy S et al. Cureus 2023).
Traducir esta investigación para uso clínico es un desafío, pero debe avanzar para brindar a las personas que viven con EM respuestas a sus preguntas basadas en evidencia.
Se necesitan estudios observacionales de alta calidad que investiguen los vínculos con la discapacidad para justificar e informar el diseño de estudios intervencionistas más amplios que evalúen el potencial de la dieta como complemento de la terapia tradicional modificadora de la enfermedad en la esclerosis múltiple.
La Dra Katz, ha descrito recientemente, como la la adherencia a la dieta mediterránea predijo una menor discapacidad objetiva y reportada por los pacientes (Katz Sand I et al. Mult Scler 2023), asi como pacientes con menor score de severidad en esclerosis multiple se asocia a mayor adherencia a la dieta mediterranea (Bronzini M et al. Nutrients 2024), impacto en reduccion de fatiga (Ertas Y et al. Nutr Neurosci 2023), calidad de vida y EDSS (Uygun S et al. Nutr Neurosci 2024).
La dieta tiene un profundo efecto sobre la salud. Aunque no existe una dieta específica recomendada para las personas con esclerosis múltiple, mantener una dieta consumiendo productos saludables y equilibrados es una parte importante del control de la enfermedad para muchas personas.
Los hallazgos de un estudio recientemente publicado nos sugieren que la dieta mediterránea es una intervención nutricional prometedora para enlentecer la progresión de la esclerosis múltiple y minimizar la gravedad de los síntomas relacionados con la enfermedad.
Aging Clin Exp Res 2024
Christina Tryfonos, Maria Chrysafi, Sousana K Papadopoulou, Konstantinos Vadikolias, Maria Spanoudaki, Maria Mentzelou, Dimitrios Fotiou, Eleni Pavlidou, Georgios Gkouvas, Theofanis Vorvolakos, Apostolos Michailidis, Alexia Bisbinas, Olga Alexatou, Constantinos Giaginis
Abstract
Antecedentes: La esclerosis múltiple (EM) constituye una enfermedad desmielinizante inflamatoria y degenerativa crónica, que puede conducir progresivamente a una amplia gama de síntomas de función sensoriomotora, cognitiva, visual y autonómica, independientemente de la edad del paciente. Sin embargo, los estudios clínicos que examinan el papel de los patrones dietéticos frente a la progresión de la enfermedad y la sintomatología siguen siendo extremadamente escasos, especialmente en lo que respecta a la dieta mediterránea (DM) en el subgrupo de edad de adultos mayores con EM.
Objetivos: El presente estudio tuvo como objetivo investigar el impacto potencial del cumplimiento de la DM en la progresión de la enfermedad y la gravedad de los síntomas, así como en la calidad de vida y la actividad física de adultos mayores con EM que viven en la comunidad.
Métodos: Se trata de un estudio transversal realizado en 227 adultos mayores sin antecedentes de otra enfermedad grave. Se aplicaron cuestionarios relevantes para recopilar factores sociodemográficos y antropométricos mediante entrevistas cara a cara entre pacientes y personal calificado. Los biomarcadores séricos se recuperaron de los registros médicos de los pacientes.
Resultados: Un mayor cumplimiento de la DM se asoció de forma independiente con la edad de los pacientes más jóvenes, un menor riesgo de sobrepeso/obesidad y obesidad abdominal, una menor progresión de la enfermedad y una mayor masa muscular, así como una mayor actividad física, una mejor calidad de vida y ferritina y albúmina séricas adecuadas. niveles
CONCLUSIONES: La DM puede ejercer efectos beneficiosos en adultos mayores con EM. Se recomiendan encarecidamente estrategias y políticas futuras para informar tanto a la población general como a los pacientes mayores con EM sobre los efectos beneficiosos de la EM en la prevención de la EM y en la mejora o incluso la desaceleración de la progresión de la enfermedad y la gravedad de los síntomas de la EM.
- Evaluación de la calidad de vida.
- Se utilizó el MS Quality of Life-54 (MSQOL-54), un cuestionario validado y reconocido para evaluar la calidad de vida multidimensional relacionada con la salud de las personas asignadas con EM.
- Evaluación de actividad física
- También evaluaron los niveles de actividad física utilizando el Cuestionario Internacional de Actividad Física (IPAQ) en el que los sujetos mencionan cuánto ejercicio hicieron en una semana típica.
- Evaluación de la adherencia a la dieta mediterránea.
- Para evaluar la adherencia a la DM utilizaron el Mediterránea Diet Score (MedDietScore)
- Conclusión
- Este estudio transversal proporciona evidencia sustancial de que la adopción de la dieta mediterránea puede ralentizar la progresión de la enfermedad de esclerosis múltiple y puede mejorar la gravedad de los síntomas en los adultos mayores, promoviendo una mejor calidad de vida y aumentando los niveles de actividad física.
Si te ha sido útil la información, compártela con tus pacientes, colegas y amigos: https://neuronavasms.blogspot.com/